INGREDIENTES (para 2 personas)
- 200g de garbanzos cocidos y enjuagados.
- 20mL de agua.
- 1 cucharadas de tahini (pasta de sésamo).
- 1 diente de ajo pequeño.
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra.
- Cucharadita de comino molido.
- Pimentón de la Vera.
- Pizca de sal.
ELABORACIÓN
- Introduce los garbanzos, el agua, la pasta de sésamo, el ajo, comino, sal y el aceite de oliva en la procesadora de alimentos o batidora y bate hasta conseguir una pasta untable. Puedes moler las semillas de sésamo crudas o comprar la pasta de sésamo ya preparada, conocida como tahina o tahini.
- Para corregir la textura, usar agua hasta obtener la textura deseada.
- Probar para rectificar el sabor con sal y especias.
- Servir con pimentón y aceite de oliva.
VALORACIÓN NUTRICIONAL
Un plato con un buen
Una receta de origen árabe con un alto aporte de fibra, hierro, calcio, fósforo, potasio y magnesio y vitaminas del grupo B (B1, B6 y B9).
Un plato con un alto poder antiinflamatorio que supone una buena fuente vegetal proteica y energética. El aporte graso es debido al aporte de ácidos grasos esenciales en forma de ácido linoleico y linolénico que ayudan a favorecer la salud celular.
Esta forma de consumir las legumbres mejora la digestión de estas al encontrarse triturada; una receta que tradicionalmente incluye zumo de limón, pero ha sido adaptada para la reducción de histamina.
kcal/ración: 340
Carbohidratos: 31g
De los cuales azúcares: 9g
Grasas: 21g
Proteínas: 11g
Sodio: 0,39g