Las estaciones son periodos de cambio, la naturaleza revive o se marchita, el clima se modifica, y nuestra rutina y salud también presentan cambios. Un efecto sobre la salud mental es el trastorno afectivo estacional.
Desde Ysana nos preocupamos por tu salud, por ello, hoy te explicamos qué es el trastorno afectivo estacional, sus causas, síntomas y efectos, así como su tratamiento y prevención.
¿Qué es el trastorno afectivo estacional?
El trastorno afectivo estacional (TAE) es un tipo de depresión leve que sigue un patrón estacional, es decir, solo ocurre en un período específico del año, concretamente en otoño y/o invierno.
Causas del trastorno afectivo estacional
Este trastorno aparece debido a la respuesta del sistema nervioso central a la disminución de las horas de luz que se da en estas estaciones.
Esto es debido a que los días más cortos y la menor exposición solar afectan directamente a dos sustancias imprescindibles, la melatonina y la serotonina.
La melatonina está relacionada con los ciclos de vigilia-sueño, mientras que la serotonina está relacionada con la energía y el estado de ánimo.
En la oscuridad se produce más melatonina, lo que hace que la persona se sienta somnolienta en esta época de más oscuridad.
Por otra parte, la serotonina se produce en mayor cantidad al exponernos al sol, por lo que la reducción de la exposición solar hace que nos podamos sentir más desanimados y cansados.
Síntomas del trastorno afectivo estacional
Los síntomas principales de este problema son los siguientes:
- Cambios en el estado anímico.
- Tendencia al pesimismo.
- Anhedonia (incapacidad de sentir placer o satisfacción, desinterés).
- Falta de energía.
- Trastornos del sueño.
- Tendencia a seguir una peor alimentación.
- Problemas de concentración.
Tratamiento y prevención
Tanto para tratar como para prevenir el trastorno afectivo estacional como para prevenirlo, será relevante seguir los siguientes hábitos:
- Intentar exponernos en la medida de lo posible al sol.
- Realizar ejercicio físico al aire libre para exponernos al sol y segregar endorfinas que nos hagan sentir bien.
- Relacionarnos con personas que nos hagan sentir bien y hacer actividades que nos gusten.
- Seguir una buena alimentación, sobre todo a base de fruta y verdura, reduciendo o evitando los hidratos de carbono y los azúcares.
- Mantener una rutina de sueño.
Además, un médico podrá recomendar la fototerapia (terapia de luz), psicoterapia, medicación o la toma de complementos alimenticios naturales.
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Ahora ya conoces más acerca del trastorno afectivo estacional. Si quieres saber más acerca de cómo cuidar tu salud de manera natural, te invitamos a seguir los artículos de nuestro blog y conocer nuestros productos para el control del estrés.